Este es un muy buen momento para que hables con tus abuelos si tienes la suerte de conservarlos aún. Preguntales sobre su juventud, sobre como eran las cosas cuando aún eran jóvenes y despreocupados de la vida. Incluso pregúntales como eran las cerrajerías en sus tiempos.

Hablando con ellos aprenderás que el mundo ha cambiado de formas muy radicales y a veces muy aceleradas en las últimas décadas, no solo por inventos revolucionarios como el internet o el café instantáneo, por cosas más sencillas y profundas para nuestras jóvenes mentes como servicios básicos.

Si miramos para atrás brevemente sabremos que muchos de los procedimientos médicos realizados hoy constituirían primeras planas en la prensa y tv denunciando las viles torturas de las que fuimos objetos; y ni hablar del hecho de que muchas veces la gente no llegaba a acudir a estar torturas pues las personas morían de cosas muy simples por las que no debemos preocuparnos en el mundo moderno.

Debemos estar siempre agradecidos de la fortuna de vivir en un mundo con móviles y fotos de gatitos disponibles las 24 horas del día. Pero más importante que estar agradecido muchas veces es simplemente saber que un cambio sucedió y que algo hoy en día está mejor que en la época en la que el abuelo Paco era un crío. Entre estos cambios imperceptibles tenemos a los cerrajeros.

Verás, cuando piensas en cerrajeros o sus cerrajerías, probablemente sigas pensando en el mundo como era hace 30 o 40 años, donde un señor gordo y malhumorado se sentaba en su pequeña tienda a esperar que llegase algún cliente, en medio de la mugre y la oscuridad, ahogado por paredes llenas de llaves que lo miran sin clemencia.

Este mismo señor que con pasos lentos y refunfuños se dirigía a revisar una cerradura que se ha dado de baja a si misma y donde muchas veces en lugar de una reparación terminaba echando la casa abajo, arrancando la cerradura y colocando una nueva a expensas de tu bolsillo.

Pero estas son cosas que han cambiado en la actualidad, para muestra un botón cerrajeros-gracia.es, aunque si que existen aún los cerrajeros con sobrepeso, pero el resto del estereotipo está en el pasado. La cerrajería hoy en día es un negocio moderno, como el resto del mundo. Los cerrajeros aprovechamos el poderío de internet para comunicarnos con nuestros clientes. La inmediatez de las redes sociales y nuevas vias de comunicación para establecer contacto con viejos, nuevos y potenciales clientes. El internet permite investigar, conocer las nuevas necesidades en el mundo de la seguridad y como satisfacerlas. Estar al día con los avances en cerrojos y candados y las últimas tecnologías aplicadas a estos mecanismos.

Hoy en día con un click puedes encontrar nuestra ubicación exacta por si necesitas visitarnos o llamarnos para acudir al instante a solucionar alguna emergencia. Turnos de 24 horas atentos por las diversas vías de comunicación y seguimiento fácil y sencillo una vez que el trabajo esté realizado. Los cerrajeros forman y avanzan con la actualidad, como cualquier oficio que se respete. Así que no te preocupes, sabemos que es snapchat y sabemos la diferencia entre android e iOS como cualquier otro mortal actual.